sábado, diciembre 31, 2011

Sierra Madre del Sur


Va terminando el Valle de Oaxaca. Los lomeríos se van haciendo más elevados. Al pasar Sola de Vega, cruzando el río, las curvas son más pronunciadas. El bosque es predominantemente de ocote. El olor a trementina es fuerte por instantes. Ascenso y descenso. Se pasa por Juchatengo, a la orilla del río, que fue Atoyac al cruzar el Valle. Otro ascenso hasta el Cerro del Vidrio. Ahí hay una bifurcación, a Puerto Escondido y a Juquila. El verde es intenso. El terreno con pendiente pronunciada. La carretera sinuosa. Los peregrinos dejan huellas de su fe y esperanza en los árboles y sobre el terreno. Por la tarde la niebla va bajando y cubriendo la inmensa montaña.





Araucaria, pinos y ocote

Cascada de Amialtepec


jueves, diciembre 22, 2011

Calenda de alebrijes en la Catedral de Oaxaca


Un espectáculo multimedia se repite en la fachada de la Catedral de Oaxaca. Los alebrijes avanzan en calenda -desfile de bailarines con banda de música-. Oaxaca sigue de fiesta. Y mañana por la tarde y al anochecer será la fiesta de los rábanos.




Y el espectáculo de la noche de ayer concluyó con una Calenda de Alebrijes al son del Jarabe de Valle.

martes, diciembre 20, 2011

Veracruz, de la orilla del mar a la cima de nieve permanente


Saboreamos un café lechero en La Parroquia que abrió cuando la primera tenía 200 años, hace 3. Charla y despedida.








En el tenor de las precampañas un precandidato a diputado del partido de logo azul, recorrió el zócalo acompañado de una pequeña comparsa, con tambores de batucada. Fue muy evidente que no eran simpatizantes, uno de ellos llevaba una de las banderas, en la que se promueve a la precandidata presidencial de ese partido, al revés. Y queda la duda ¿saben leer?




Pasamos por Xalapa, de donde habíamos partido al amanecer, y avanzamos en ascenso. Cuando ya estábamos del lado poniente del Cofre de Perote tuvimos a la vista el Pico de Orizaba con sus nieves continuas. Y seguimos el viaje. Llegó la noche.



sábado, diciembre 03, 2011

Playa Caracol


Está entre las playas de Mocambo y El Morro en Boca del Río. Nos reunimos para compartir los alimentos. Un día de poco sol y suficiente luz, de las dos. Previamente se recordó a los ausentes: Osvaldo, Rafael y Antonio, quienes también nos acompañaban hasta hace pocos meses. Se brindó por el bienestar y se invitó a reflexionar sobre el futuro y pensar en los demás, en los que no han tenido las oportunidades que les permitan una vida digna. Nos volveremos a ver.





Y los jarochos tocaban:



sábado, noviembre 26, 2011

El Granma a 55 años de su partida de Tuxpan


A media mañana salimos a Tuxpan. Cruzamos el río y fuimos hasta la playa. Conserva los pinos de hace varias décadas. Vimos llegar del Golfo de México y entrar por el río una nave de gran calado. El río estaba tranquilo. Una gran nube hizo de la tarde un espectáculo. El sol, al ocultarse, contribuyó. Cruzó el cielo un aeroplano. Varias aves lo acompañaron. Se hizo de noche. E inicio la fiesta.






Se conmemoró el 55 aniversario de la partida del Granma con los expedicionarios cubanos que llegaron a Las Coloradas en la isla. Y triunfaron el 1 de enero de 1959. Antonio del Conde -El Cuate-, quien fue dueño del yate, hizo comentarios sobre el suceso. En una charla previa le pregunté: ¿aquella noche que partía el Granma, sabías que entrabas a la historia?. Su respuesta fue: No, no lo sabía entonces. Hice lo que me tocó hacer. Y anoche escuchamos al Cuate referir el hecho.

viernes, noviembre 04, 2011

Noche y día de muertos en Oaxaca


La veladoras iluminan cada uno de los nichos del Panteón. Algunas catrinas se pasean entre los cientos de deudos y visitantes que ven las tumbas y los altares. La muerte está presente. Panes, chocolate, frutas, mole y mezcal esperan en los altares la llegada de los difuntos.










Disponible
En una esquina del panteón una banda toca Dios nunca muere. En uno de los nichos se recuerda que ahí estuvo sepultado el autor, Macedonio Alcalá.


Muere el sol en los montes
Con la luz que agoniza
Pues la vida en su prisa
Nos conduce a morir

Pero no importa saber
Que voy a tener el mismo final
Porque me queda el consuelo
Que Dios nunca morirá

Voy a dejar las cosas que amé
La tierra ideal que me vió nacer
Sé que después habré de gozar
La dicha y la paz
Que en Dios hallaré

Sé que la vida empieza
En donde se piensa
Que la realizada termina

Sé que Dios nunca muere
Y que se conmueve
Del que busca su beatitud

Sé que una nueva luz
Habrá de alcanzar nuestra soledad
Y que todo aquel que llega a morir
Empieza a vivir una eternidad

Muere el sol en los montes
Con la luz que agoniza
Pues la vida en su prisa
Nos conduce a morir




domingo, octubre 09, 2011

Luna en Oaxaca


De las lunas, la de octubre es más hermosa... Así lo registra la canción romántica. La luna y detrás el inmenso cielo azul es lo que que vi la antepenúltima noche. La luna iluminando las fachadas -cantera verde y hierro forjado- centenarias. Y me traje esa luna conmigo. Bajo esa luna, en una pared, me encontré una poesía visual. Y allí se quedó esa luna.






miércoles, septiembre 14, 2011

Chiapa de Corzo


En el centro de Chiapas está la primer capital de este estado mexicano. Chiapa de Corzo, inicialmente Chiapa de los Indios. Conserva algunas construcciones de la época colonial: la majestuosa Fuente Mudejar, un reloj y un puente. Bajo la arquería de uno de sus portales se venden artesanías, textiles elaborados principalmente por la etnia Tzoltzil.


Muñecos Parachicos

Se conserva la parroquia dedicada a Santo Domingo de Guzmán. Desde lo alto del campanario se tiene una vista excelente de la población.



En las calles aledañas a ese parroquia caminan las vendedoras de textiles. Entre ellas, las pequeñas hermanas Rufina y Marisol, la primera de ellas llevando en su espalda a su hermanita Nohemí, primero muy calladas y luego de hábil conversación. Ellas vienen desde Chenaló. Y así como ellas, otras personas de la etnia Tzoltizil caminan con sus textiles a cuestas.


Chiapas -agua que corre debajo del cerro- es tierra de marimbas. Y Chiapa de Corzo es la cuna de don Zeferino Nandayapa, virtuoso de este instrumento que hace cantar a las maderas.