Ayer, en nuestra visita al Palacio de Bellas Artes, también vimos la exposición de las pinturas de Vlady.
Vlady de origen ruso y radicado en México, pintó su visión del mundo, de las relaciones humanas. Fue un disidente.
Lo que me pareció más notorio de la pintura de Vlady, que es la primera vez que la veo, fue el color. Su paleta era extensa. No hay un color predominante. Son los colores.
En su obra monocromática, dibujos a tinta, destacan las formas o la forma de entender y expresar el pintor su manera de entender la relación de pareja. El hombre y la mujer. Toda una sala con dibujos eróticos, el culto a los cuerpos.
El pintor se nos presenta en las diferentes edades de su vida a través de sus autorretratos. Me impactó el Autorretrato ante el espejo. Como se ve uno ante el espejo, que es la única forma de verse a uno mismo en un mismo instante, la otra sería la fotografía o el video, éstas no son simultaneas como lo es el espejo…
1 comentario:
Hola Eleonaí,
me resultan muy interesantes las pinturas de Vlady.Me gustaría verlas en directo, claro, para apreciarlas en toda su dimensión.
En mis propias pinturas, algunas veces me gusta reflexionar sobre la condición humana, las emociones y los sentimientos, sirviéndome de la figura humana como motivo desencadenante. También encuentro el autorretrato un medio revelador de aspectos de uno mismo, que normalmente no se ven reflejados ni en el espejo que te ayuda a la labor de auto-pintarte. El espejo puede resultar como las bolas de cristal de adivinación de las "brujas", simplemente un centro donde concentrarte para que se abra una puertita que te deje ver "algo" de ti mismo.
un abrazo desde Bcn
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