Del concreto a la contemplación de la lluvia
Por la tarde regresamos de la ciudad de México. Dejamos los grandes conjuntos de concreto y acero. Al tomar la avenida Zaragoza hacia la salida por el oriente de la ciudad, vimos el Metro en su vía elevada.
Antes de tomar la desviación por la ruta tlazcalteca, contemplamos los volcanes Iztaccihuatl y Popocatépetl. En su idilio eterno.
Al transitar entre Apizaco y Huamantla, Tlaxcala, vimos un gran Arcoirís. Despues empezó la lluvia, suave, luego intensa, luego granizo. Caía tanto granizo que varios vehículos nos detuvimos por un momento al lado de la carretera.
Llegamos a Xalapa cuando ya era de noche.
domingo, septiembre 17, 2006
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10 comentarios:
El arco iris siempre me parece una manifestación divina. Precioso.
abrazotes
Ni te imaginas las ganas que tengo que venga la lluvia después del intenso verano de calor que hemos pasado.
Hola Eleonaí :)
Saludos desde España, ese clima húmedo lo extraño, acá casi no llueve, es clima mediterráneo, como que empieza pero todavía no toma el cauce del tiempo...
Gracias por compartir partecitas de México y mi Xalapa querido.
UN ABRAZO.
Buen viaje de regreso a Xalapa...
Un beso
Eleonaí
Es muy agradable entrar a visitarte.
El arcoiris me recordó una superstición "no se debe apuntar con el índice, porque..." creo que decían salía algo en el dedo. También que si llegabas al final del arcoiris encontrarías un tesoro...
Saludos
Lluvia todo el camino, pero los paisajes que tal? divinos no?
Saludos =)
Lluvia......bendición.......romance.....nostalgia.........amor.........reencuentros.......despedidas.........lágrimas.....¿cuál de todos?
eso está lindo!!!
Esa ruta me trae gratos recuerdos.
Elonaí...bellas fotos, me imagino la ruta muy hermosa.
Besos.
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